Primera prueba con un dron para sulfatar cultivos en A Limia

Primera prueba con un dron para sulfatar cultivos en A Limia

Un agricultor de Xinzo, Amador Saborido, trata un cultivo de guisantes por medio de un vehículo aéreo no tripulado, que agiliza el trabajo y evita los daños que causaría un tractor al entrar en el campo.

[thim-video video_type=»youtube» youtube_id=»W_-qHpQfouw»][vc_empty_space height=»50px»]

Los drones están introduciendo nuevas posibilidades de manejo en la agricultura, como la aplicación de tratamientos aéreos de fitofortificantes. En Xinzo da Limia, un agricultor, Amador Saborido, ha realizado una primera prueba con dron en una parcela de 1,5 hectáreas de guisante. La experiencia, a falta de comprobar el resultado del producto sobre el cultivo, es positiva.

Los beneficios del uso del dron son claros. «Se ahorra tiempo de trabajo y evitas pasar con el tractor por la parcela, con el daño que eso siempre causa en el cultivo», explica Amador, que destaca también el menor consumo de agua: unos 16-17 litros de agua por hectárea con el dron frente a los 350 – 400 litros que consumiría con el tractor.

El escaso consumo de agua se debe a que la aplicación con el dron se hace a un ultrabajo volumen, pero el sistema parece no estar reñido con la eficacia. «Moja bien, incluso coloqué en los surcos pegatinas de test de las que se utilizan para comprobar los equipos fitosanitarios y aparecían bien marcadas por la pulverización del dron», indica Amador, que está a la espera de que pasen los días para comprobar la efectividad del tratamiento.

Normativa de tratamientos aéreos
Uno de los problemas actuales del dron es que su uso está equiparado por la legislación con el empleo de una avioneta. Pese a que el dron tiene incluso menos deriva de producto que un tratamiento convencional con pulverizador, su utilización está por el momento restringida. Tanto un vehículo no tripulado como una avioneta se consideran tratamientos aéreos, lo que limita mucho los productos que se pueden aplicar sin necesidad de autorizaciones especiales. «En nuestro caso, teníamos un ataque de oídio en el cultivo de guisantes, y en lugar de tratar con un fungicida, que sería lo habitual, empleamos un bioestimulante», señala Amador.

«Yo soy partidario de tratar lo menos posible. Por ejemplo, en la patata prácticamente ya eliminamos el uso del herbicida con la práctica del alomado, pero aún es necesario dar algún fungicida y una pasada contra el escarabajo», valora.

El agricultor gestiona alrededor de 50 hectáreas, dedicadas en buena parte a trigo, a patata y a maíz. Hace 3 años, ya fue uno de los pioneros en la comarca de A Limia en la introducción del riego por goteo para las patatas y el maíz. Con la utilización del dron para tratamientos, que gestionó a través de la empresa lalinense Aerocámaras, es también pionero en la comarca en un sistema al que le augura futuro.

[thim-video video_type=»youtube» youtube_id=»-lu5UTF1rZE»][vc_empty_space height=»50px»]

«Es un invento que me parece muy bueno. Lo había visto por la tele y llevaba un par de años buscando la manera de introducirlo» -señala Amador-. «La única pega que tiene es que por ahora el precio de contratar un tratamiento con dron es bastante más alto que si contratas el mismo tratamiento con tractor. Puede rondar el doble, pero si se extendiese su utilización, está claro que bajarían los precios y pienso que podría ser competitivo», apunta.

En A Limia, Amador señala que, por el momento, los agricultores que conocieron su experiencia son reacios al dron, principalmente por el precio, aunque también extraña el hecho de que el dron pueda hacer tratamientos efectivos con tan poca cantidad de agua, en comparación con las aplicaciones tradicionales con tractor. «Hay que experimentar y comprobar el resultado. Es la mejor manera de valorarlo», defiende Amador, que estudia extender esta primera prueba a más tratamientos en otros cultivos.

Nota: Vídeos cedidos por Aerocámaras.

Hacia un futuro de drones

El desarrollo tecnológico de los drones ha permitido que sus aplicaciones se multipliquen en actividades como la seguridad ciudadana, la inspección de infraestructuras o el reparto de mercancías, entre muchas otras. Solo en España, este sector en crecimiento alcanzará en menos de 15 años un volumen de negocio próximo a los 1.200 millones de euros.

Un dron otea los alrededores y las calles de una ciudad europea. Equipado con cámaras de detección de temperatura y micrófonos localiza a las personas que pasean por la calle y les recuerda la obligación de permanecer en casa.

Mientras, China inicia una operación de limpieza en la que cientos de drones desinfectan lugares públicos con ayuda de un equipamiento de pulverización. Y a miles de kilómetros, en Ghana, un ejército teledirigido sobrevuela la localidad de Omenanko con pequeños paquetes de un kilo. En su interior: vacunas, medicinas e incluso transfusiones de sangre aseguran el suministro médico a cientos de personas en zonas remotas del país.

Distintos puntos del mapa, distintas aplicaciones, pero en definitiva soluciones que facilitan la vida de las personas. El desarrollo tecnológico de los drones ha permitido que sus aplicaciones se multipliquen; el ingenio de sus expertos, que la tecnología responda a las necesidades de cada momento. Resiliencia.

Cada día aparecen nuevas aplicaciones que, combinadas con otras tecnologías como la IA, hacen que las posibilidades sean ilimitadas

“Cada día aparecen nuevas aplicaciones que, combinadas con otras tecnologías existentes o en desarrollo, como por ejemplo la inteligencia artificial, sin duda ofrecerán nuevas posibilidades en el sector de los drones”, detalla David Madroño, coordinador de pilotos de RPAS del sindicato aéreo SEPLA.

“El número de aplicaciones que irán presentándose en el sector es ilimitado ya que depende de la imaginación de la sociedad”, asegura Madroño y aventura que el foco estará puesto en aquellas soluciones que minimicen los riesgos que corren los trabajadores desempeñando determinadas tareas y en las que suponga un ahorro significativo de los costes.

Sector en expansión

En concreto, el sector logístico y de distribución de mercancías es uno de los que más rápido ha implantado este tipo de vehículos aéreos no tripulados, no solo para mejorar la competitividad, la eficiencia y la sostenibilidad del sector, sino también para llegar a lugares a los que acceder por los medios de transporte habituales resulta muy complejo.

Así, el departamento de correos suizo ya utiliza los drones para recoger y entregar envíos especiales enfocados en la atención sanitaria para garantizar una entrega lo más rápido posible. De esta forma, se reduce de forma notable el tiempo de entrega, algo fundamental, más aún en sectores relacionados con la salud.

Pero sus aplicaciones van mucho más allá del reparto. Actividades relacionadas con la supervisión, la vigilancia y la prevención de riesgos encontrarán en un futuro próximo un aliado en esta tecnología. “Subir a una persona a supervisar una torre de alta tensión o el estado de una azotea de una catedral del siglo XV es muy costoso desde el punto de vista económico, muy arriesgado para el operario e incluso podría ser lesivo para el patrimonio cultural e histórico. Por el contrario, subir hasta esos sitios un dron tan solo supone darle a un botón en una pantalla por lo que el camino está claro”, asegura José Antonio Álvarez López, secretario general de la Asociación de Empresas de Drones, DRONIBERIA.

“Es un sector que está comenzando” y las posibilidades de mejora son enormes. “Por ejemplo, cuando se despliegue la red 5G esas posibilidades aumentarán por la reducida latencia de las comunicaciones”, indica López en referencia a la potencialidad de este sector estimada en un volumen de negocio de unos 1.200 millones de euros en los próximos 15 años, según las autoridades españolas.

Nueva normativa para el crecimiento

Es un sector en constante desarrollo, con mucho margen de mejora

“A pesar del crecimiento de los últimos 10 años, todavía es un sector en constante desarrollo, con mucho margen de mejora, ya sea en las aplicaciones con las que se pueden dotar estos dispositivos o empleados junto a otras tecnologías, como los trabajos de revisión de infraestructuras o de aparataje aeronáutico. Aunque sí es cierto que esto dependerá mucho de la normativa”, apunta José Antonio Álvarez López, secretario general de la asociación de empresas de drones, DRONIBERIA.

Por el momento, lo que es seguro es que los avances y las aplicaciones que puedan desarrollar los drones en la sociedad, dependerá en gran parte de las nuevas legislaciones que permitan un desarrollo adecuado a las demandas actuales.

Expedientes sancionadores drones

¿Quieres saber qué número de sanciones ha propuesto la @AesaSpain por mal uso de #DRONES desglosado x provincias y aeropuertos/zonas excluidas?

Aquí te dejamos con los datos oficiales.

[pdf-embedder url=»https://rpascorso.com/wp-content/uploads/2020/06/expedientdocblobservlet.pdf»]